Notables visitas en la Semana del Festival de Cannes, con la presencia de Mortensen y una película que adquiere mayor vigencia con los cambios políticos recientes.
«Capitán Fantástico».
Acaba de finalizar el 31º Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, cuyo premio mayor se llevó la discutida película israelí “People That Are Not There”, con la presencia de su directora en la ceremonia de clausura. Hubo buenas películas pero poca presencia de grandes estrellas con apenas el director francés Olivier Assayas y el de fotografía Vittorio Storaro entre las visitas más relevantes.
Para los cinéfilos y la crítica la semana siguiente se inicia, en franco contraste con el único Festival Clase A de América Latina, con la presencia de Thierry Frémaux, director del Festival de Cannes presentando en la sala Gaumont seis grandes películas de dicho evento. Comienzo auspicioso con “I, Daniel Blake”, Palma de Oro, pero aún más impactante ya que las siguientes dos películas contaron con la presencia de sus intérpretes principales, figuras que hacen palidecer a las ya mencionadas de Mar del Plata.
Por un lado Isabelle Huppert y el film “Elle” de Paul Verhoeven (“El vengador del futuro”, “Bajos instintos”), que representa a Francia en la carrera por la nominación al Oscar extranjero.
Por el otro Viggo Mortensen y la película “Capitán Fantástico” de Matt Ross que se estrena esta misma semana en nuestro país. A sala colmada se lo vio al célebre actor, con “algo” de argentino, hablando un casi perfecto castellano. No podía faltar alguna alusión a su club deportivo favorito señalando el predominio (sobre todo el rojo) en la iluminación del cine Gaumont. Pero también hubo un momento de tristeza cuando dijo dedicar la película al club Chapecoense de Brasil por el luctuoso accidente que terminó con la vida de casi todos sus jugadores. Incluso expresó textualmente: “Cómo es la vida, pensando que Danilo le ataja un disparo en el último minuto al jugador Angeleri de San Lorenzo, con lo que su equipo sale vivo pero pocos días después el arquero y sus compañeros mueren”.
Viggo Mortensen presenta la película en el cine Gaumont.
“Capitán Fantástico” se inicia dramáticamente cuando un grupo de niños y su padre Ben (Mortensen) se encuentran cazando un ciervo en el Estado de Washington. Los seis hijos están camuflados con pintura oscura y será Bo, el mayor quien mate al animal. Su padre le dirá entonces: “hoy el niño ha muerto y en su lugar hay un hombre”. Pronto el espectador se enterará de la ausencia de la madre, cuya causa conviene no develar, así como de que ninguno va a la escuela aun cuando se instruyen con libros y otros elementos didácticos contenidos en el Bus en que se desplazan y que lleva el nombre de “Sam”.
A medida que avanza el metraje se advierte el fuerte mensaje contra el sistema capitalista que intenta y logra en gran parte inculcarles el padre a sus hijos. Uno de ellos afirma que era troskista y ahora se ha vuelto maoísta, refrendándolo con un enérgico “Power to the People”. Hay también una fuerte devoción del grupo por Noam Chomsky, un rechazo a las gaseosas que su padre califica de “poison water”, no así al vino como lo muestra una lograda escena donde hacen alusión a la madre
Los nombres de los chicos (Bodevan, Kielyr, Vespyr, Rellian, Zaja, Nai) no son convencionales ni comunes y forman parte de la rebeldía de su progenitor. La educación sexual que reciben intenta ser “naturalista” y ante una pregunta de la nena más pequeña Ben le hace leer un libro para adultos (“The Joy of Sex”).
Pero no todo es armonía en el grupo y cuando se produzca la muerte de un pariente mayor y decidan acudir a la iglesia donde lo velan se producirá un encuentro nada amistoso con el abuelo materno (notable Frank Langella). No conviene adelantar mucho más y sólo referir a las palabras de Viggo en la sala Gaumont señalando que “es bueno, como lo hace su personaje, poner la cara cuando uno se ha equivocado”.
«Una historia de violencia».
Lo que quedó claro es que el actor de “Una historia violenta” siente una fuerte identificación con su personaje al afirmar ante el público que no está “conforme con el gobierno actual argentino y sus actitudes hacia la cultura y muchas otras cosas”. Pese a lo cual afirmó que “Capitán Fantástico” no es un film de mensaje ni de ideología.
Es oportuno repasar parte de su filmografía que comienza en 1985 con un breve papel en la genial “Testigo en peligro” de Peter Weir, donde formaba parte de la comunidad Amish, donde se refugiaba Harrison Ford.
En 1991 tiene un rol nada menor en “The Indian Runner”, el primer largometraje dirigido (y no estrenado localmente) por Sean Penn. Poco después es Brian De Palma quien lo incluye en el reparto de “Carlito’s Way”, donde acompaña a Al Pacino, de reciente y accidentado paso por Argentina y donde también actúa nuestro Jorge Porcel.
A mediados de los ’90 dos hermanos cineastas lo dirigen. El primero en hacerlo será el trágicamente fallecido Tony Scott en “Marea Roja” (“Crimson Tide”), donde un capitán de submarino nuclear (Gene Hackman) se enfrenta con su segundo (Denzel Washington) en plena guerra fría. Luego lo hará Ridley (“Gladiador”) en “Hasta el límite” (“G.I.Jane”) donde ya encabeza el reparto junto a Demi Moore. Esta compone a la sargenta Ripley, una teniente de marina (Navy SEALS), cuyo jefe (Mortensen) la somete a malos tratos en un submarino en el que no hay baño femenino (!). Ni la presencia de Anne Bancroft como una senadora feminista logran salvar a la película.
«El retorno del Rey».
En un mismo año (1998) se lo ve actuando en dos remakes de películas de Hitchcock: “Un crimen perfecto” de Andrew Davis y “Psicosis” de Gus Van Sant, dato curioso digno del Guiness.
Pero será sin duda a inicios del presente siglo cuando su personaje de Aragorn en las tres partes de “El señor de los anillos”, dirigidas por Peter Jackson, lo haga famoso. Y será la maestría de David Cronenberg en tres películas: “Una historia violenta”, “Promesas del Este” y “Un método peligroso”, quien lo consagre definitivamente.
En los últimos años Mortensen ha empezado a actuar en películas de habla hispana, al dominar perfectamente el idioma. Ya lo había hecho en el 2006 al encarnar al personaje central de “Alatriste”, creado por Arturo Pérez-Reverte.
Dos realizadores argentinos ya lo han dirigido. Primero fue Ana Piterbarg en “Todos tenemos un plan”, donde Viggo compone a hermanos gemelos. Uno de ellos (Agustín) es un médico cuya esposa (Soledad Villamil) quiere adoptar a un bebe, pese a la resistencia de su marido. Habrá un juego de equívocos con Pedro, el otro hermano que acepta la sustitución y la presencia de Daniel Fanego y Sofía Gala Castiglione, componiendo a dos personajes secundarios en logradas recreaciones. Por ser una ópera prima se le perdonan algunas incoherencias e inverosimilitudes, destacándose la ambientación en el Delta y el buen debut del actor en un film local.
«Jauja» de Lisandro Alonso.
“Jauja” ya fue un desafío mayor al producirse su encuentro con Lisandro Alonso, uno de nuestros directores más internacionales. La película estuvo en Cannes, participando en “Un certain regard” en el 2014 y tuvo mayormente buenas críticas. Seguramente gracias a “Jauja”, Thierry Frémaux influyó en la decisión de programar este año en la misma sección del Festival de Cannes a “Capitán Fantástico”, que ahora se estrena y que, en sus propias palabras, adquiere mayor vigencia con el reciente triunfo de Donald Trump.
