La última entrega protagonizada por Vin Diesel llega a salas el 13 de abril.
La última vuelta de tuerca: Dom traiciona a la familia. “Rápidos y furiosos 8” (The fate of the furious, 2016) sube la apuesta: no sólo tenemos autos sino también aviones, tanques y hasta un submarino rompiendo grandes placas de hielo.
Todo parece tranquilo para los Toretto. Pero Charlize Theron (quien interpreta a la cyber terrorista Cipher) interrumpirá la luna de miel de Dom para pedirle que trabaje para ella. El personaje interpretado por Vin Diesel la seguirá sin dar razones aparentes y será la familia quién intentará traerlo de vuelta en una aventura que los llevará por Cuba, Nueva York, Berlín y las heladas superficies del mar de Barents. Mientras intentan detener una posible escalada nuclear.
Vuelven Dwayne Johnson, Tyrese Gibson, Ludacris, Michelle Rodríguez, Jason Statham, Jordana Brewster y Kurt Russell. Se suman debutantes en la saga: la mencionada Charlize Theron, Kristofer Hivju, Helen Mirren y Scott Eastwood.
La nueva entrega cambió de realizador y esta vez es Felix Gary Gray el responsable de la dirección. Su última película, “Straight Outta Compton”, fue sensación en la taquilla estadounidense con la historia del grupo de rap N.W.A.
El tono de la octava entrega se muda más levemente a la comedia aunque mantiene las escenas de acción espectacular que ya son una marca registrada de la franquicia. La fórmula de “Rápido y furioso” es “más es más” y cada vez más. Se ha convertido casi en una versión automovilística de “Los indestructibles”.
Duelo Johnson-Statham.
Los personajes surgieron como compañeros de trabajo y amigos. Hasta convertirse en una familia. Como alguna vez dijo Dominic Toretto: “No tengo amigos, tengo una familia” para referirse a lazos que van más allá de la sangre.
Se trata de una familia interracial en la que hay posibilidad de identificación para todos los espectadores. A la familia Toretto le gustan las cosas simples: una cerveza en el porche de la casa, un asado en el patio y una lista de invitados a la mesa que se engrosa en cada película y a los que Dom les pide rezar antes de ingerir alimentos.
De alguna manera, son delincuentes con altos valores morales que hacen flaquear a las fuerzas policíacas que van en su búsqueda: primero fue Bryan O´Conner, en la piel de Paul Walker, y después fue Luke Hobbs (interpretado por Dwayne Johnson). Policías que miran para otro lado o abandonan las filas porque se tientan a formar parte de la familia. Como lo siente una gran parte de los espectadores que sigue la saga desde el inicio.
Sin estreno de “Rápidos y furiosos 8” en Estados Unidos o Argentina hasta el día de hoy y mañana, ya ha tenido pre-lanzamiento en Paraguay, Uruguay y Bolivia. En Paraguay quedó primera en el top ten semanal con las funciones del miércoles a la noche en 39 pantallas y 19.996 espectadores. En Bolivia se ubicó quinta con la misma cantidad de salas y 6.430 tickets. Y en Uruguay cuarta con proyección en 12 pantallas y 16.087 entradas. Por lo que se espera que el ingreso de la película sea sensación en casi todos los mercados mundiales tal como lo fueron las anteriores (ver taquilla de la saga).
Y mientras aún rugen los motores de la octava entrega, Universal ya nos ha prometido la novena película para abril de 2019 y la décima para abril de 2021, como festejo de 20 años desde el estreno de la primera.
