Actualidad, Sin categoría

“Madre!”: mi casa, mi mundo

«Madre!»: La última película de Darren Aronofsky causa polémica, odio y amor en iguales proporciones.Madre!

Inclasificable y visceral. Son las dos palabras que definen a “Madre!”. Y seguramente es la razón principal por la que viene generando reacciones tan pasionales en su paso por festivales y salas. Luego del visionado se sale en shock, tratando de descifrar si uno ha visto la peor película del año o una obra maestra.

La historia

Jennifer Lawrence interpreta a una esposa devota: la Madre del título. Vive y respira por su esposo poeta, autor y varios años mayor, el personaje de Javier Bardem. Una noche un desconocido toca su puerta (Ed Harris) y la aparente tranquilidad de la pareja comienza a derrumbarse.

La primera parte de la película destila una importante carga dramática de misterio. Madre comienza a sentirse cada vez más incómoda frente a las nuevas visitas: la mañana siguiente también se suma la esposa del desconocido, papel realizado por una aún sensual Michelle Pfeiffer.

Las emociones de Lawrence se expresan a través de la casa que ha reconstruido por amor hacia su marido. Un hogar perdido hace años por el fuego donde él intenta encontrar la inspiración perdida y donde atesora su objeto más preciado: una piedra que ha rescatado del incendio que lo motivó a continuar. Y que ella custodia porque sabe el valor que tiene para su pareja. La invasión inesperada confronta al matrimonio.

La dirección

Las películas de Darren Aronofsky siempre han dividido las aguas. Desde su debut en 1998 con “Pi” pasando por “Réquiem por un sueño” (2000) o “El cisne negro” (2010). Aunque incluye obras tal vez más clásicas en un sentido narrativo, como “El luchador” (2008).

Aronofsky elige en “Madre” un cine de texturas. Vemos y sentimos a través de Madre. Y su cámara se enfoca casi toda la película en primerísimos planos de Jennifer Lawrence, su pareja fuera del set. Y maneja varios registros: drama, misterio, gore, terror.

La polémica

“Madre!” no ha pasado inadvertida. Ha generado reacciones tan extremas que no hay espacio para los grises. Su paso por la taquilla ha sido decepcionante: U$S 13.000.000 en Estados Unidos sobre un presupuesto de U$S 30.000.000. Aunque las obras más personales de Aronofsky nunca han sido pasión de multitudes.

Lo más polémico de “Madre!” es sin dudas su tercer y último acto. Que confirma el simbolismo que carga la historia. Y que el mismo director ha señalado como una película punk con alegorías bíblicas sobre la Madre Tierra. Lo cierto es que vale la pena verla en el cine para amarla u odiarla.