Por Jorge Luis Scherer
Las cifras son tan curiosas como inexactas, pero ninguna de ellas asegura que se hayan vendido – en el mundo entero – menos de 2 mil millones de libros de Agatha Christie, en poco menos de cien años, y todo da a entender que solamente la Biblia y las obras de Shakespeare la superaron en ventas. Todo esto no resulta tan descabellado, si vemos que solamente de la novela “ Diez indiecitos” (1939), se editaron 100 millones de copias, y que la mayor parte de sus obras fueron traducidas a más de cien idiomas. El detective belga, Hércules Poirot, quien se pone de mal carácter cuando lo confunden por francés y pronuncian mal su apellido, es el principal protagonista de la mayor parte de las 66 novelas policíacas y los 20 relatos de ese género, que escribió “la reina del crimen”. Miss Marple, una viejecita solterona que cultiva su jardín con esmero, y que circunstancialmente resulta ser una aficionada en descubrir crímenes, sin salir de su condado, es el otro personaje importante de las historias de Agatha Christie. Si bien esta simpática anciana fue la preferida de la autora, no alcanzó a intervenir en tantas novelas como monsieur Poirot . El cine y la televisión, se vienen ocupando sin pausa de estos dos personajes, pensemos que la primera aparición de Hércules Poirot en el cine data de 1931, y de Miss Marple en 1961, aunque en teatro, Charles Laughton , interpretó a Poirot en 1928, en una adaptación de “El asesinato de Roger Ackroyd”, y en 1949, Barbara Mullen fue Miss Marple en la escenificación de “Asesinato en la Vicaría”.
“Asesinato en el Expreso de Oriente”, escrita por la señora Christie en el Hotel Pera Palace de Estambul, y publicada en 1934, continua siendo una de las obras más apreciadas por el público, y la estrella es Hércules Poirot, el famoso detective que mantiene brillante su cuidado bigote, como si su poder deductivo proviniera de esa agrupación pilosa, como el pelo largo significaba la fuerza de Sansón. Y dentro de muy poco, en noviembre, llegará a los cines la segunda versión cinematográfica de “Asesinato en el Expreso de Oriente”, dirigida por el británico Kenneth Branagh, quien se reservó el papel principal, nada menos que el de Poirot. Si hablamos del elenco, donde hay una sola víctima, protagonizada por Johnny Deep, aparecen muchos posibles victimarios, roles a cargo de Judi Dench, Michelle Pfeiffer, Penélope Cruz, Willem Dafoe y Derek Jacobi, entre otros sospechosos.
Subamos al Tren
El lujoso tren “Oriente Express”, que tuvo su viaje inaugural en 1883, uniendo Constantinopla –París, con una posterior conexión desde el puerto de Calais para llegar a Londres, a mediados de la década del 30 del siglo XX, continuaba manteniendo el itinerario uniendo la capital turca, que por entonces cambió su nombre por la de Estambul, con la ciudad de Calais en Francia, pasando por las estaciones de Sofía, Belgrado, Zagreb, Trieste, Venecia , Milán, Lausana y París. Agatha Christie, gran viajera, así como conocía los recorridos en ferry por el río Nilo, había disfrutado del magnífico trayecto del Oriente Express, y cómo no describir entonces ese servicio en primera clase, el mobiliario creado por artesanos europeos, los mejores chefs y sus platos más exquisitos, y por supuesto, quienes eran los viajeros: miembros de las realezas de tres continentes, personalidades del mundo, diplomáticos, y millonarios. Y millonario es el norteamericano Ratchett (Johnny Deep), quien en unas de las noches, durmiendo en su coche-cama, cuando el tren se encuentra detenido por un derrumbe de nieve, es apuñalado varias veces, doce veces para ser más exacto, según contabilizó el inspector Poirot , quien se hizo cargo del caso. Todos los pasajeros de ese vagón son sospechosos para Poirot, que va interrogando a uno por uno, incluso a la anciana princesa Dragomiroff (Judi Dench), y a otros seres de gran prestigio social, pero que son pasibles de la debilidad humana de la venganza.
Filmada en Malta, Italia e Inglaterra, cuenta con Keneth Branagh no solo como actor y director, sino también como productor, donde también se encuentra el realizador Ridley Scott . El guión pertenece a Michael Green.
Hablemos de Poirot.
En su primera novela “El misterioso caso de Styles”, de 1920, Agatha Christie crea al inspector Hércules Poirot. Un hombre de estatura baja, poco más de 1,60 metros, pulcro, enfermo por el orden, no tolera la menor asimetría. Cuando estuvo en la policía de Bélgica se hizo muy famoso por resolver casos perdidos. Una vez establecido en Londres, donde compartía habitación con su amigo el capitán Hasting, comienza a destacarse como detective privado. En esta primera novela, de la entonces muy jovencita escritora, apenas 30 años, ya se exhiben, por el estilo y las formas narrativas, las inconfundibles características de su ulterior producción, y muy especialmente la falta de escenas violentas y de morbosidad en los asesinatos , muy similar a las historias de Arthur Conan Doyle, para su personaje Sherlock Holmes, que por aquellos tiempos gozaba de gran popularidad. Tanto Poirot , como Holmes, y otros personajes de novelas policíacas salidos de la pluma de autores ingleses, vale recordar también a Wilkie Collins, con el sargento Cuff, el de “La piedra lunar”, obra tan apreciada por Borges, y Gilbert K. Chesterton con el padre Brown, todos sabuesos deductivos, a diferencia de la novela negra, que tuvo en Inglaterra una verdadera figura en P.D.James (Phyllis Dorothy James) que comenzó su carrera de escritora en la década del 60,cuando Agatha Chiristie había aminorado su marcha. Vale señalar, que P.D.James , como también se expresó alguna vez la norteamericana Patricia Highsmith, detestaban las novelas de la señora Christie Pero indudablemente, la serie negra tiene sus mejores cultores en Norteamérica ,con James Cain, Dashiell Hammeth y Raymond Chandler. Sin embargo, para pesar de muchos, en 2013, unos 600 miembros de la Asociación de Escritores del Crimen, eligieron a la obra de Agatha Christie, “El asesinato de Roger Ackroyd”, de 1926, como la mejor novela de crímenes.
Cine en el Tren
Las novelas de Agatha Christie han superado el centenar de adaptaciones para la televisión, pero no son muchas las realizadas para el cine. El actor David Suchet , es el más famoso Poirot de todos los tiempos , fueron 13 temporadas y 70 capítulos (desde 1989 hasta 2013), interpretando al detective belga. Uno de sus momentos estelares fue en “Asesinato en el Expreso a Oriente”, pero quien no tuvo la misma suerte con esa obra fue Alfred Molina, que tuvo el papel de Poirot en el teleplay que se realizó en 2001, todo resultó lamentable.
Para el cine, solamente hubo una sola versión de “Asesinato en el Expreso de Oriente”, la de 1974, realizada por el talentoso Sidney Lumet. Y fue muy buena, y lo sigue siendo. Ganó un Oscar y tuvo seis nominaciones. También contó con un elenco excepcional, actores y actrices de primer nivel internacional. Albert Finney, como Hércules Poirot, para nada olvidable, Richard Widmark, como Ratchett, el asesinado. Martin Balsam, en el papel de director de la línea ferroviaria, y mire quieres eran los sospechosos: Ingrid Bergman, Lauren Bacall, Sean Connery, John Gielgud, Jacqueline Bisset, Anthony Perkins, Vanessa Redgrave, Michael York, etc. En la fotografía ,nada menos que Geoffrey Unsworth, el magnífico diseño de producción a cargo de Tony Walton y la música de Richard Rodney Bennett , con la orquesta Royal Opera House del Covent Garden. Una de las mejores escenas de este filme, por su movimiento y colorido, sucede cuando el tren se encuentra en la estación de Estambul, minutos previos a su salida, ese es el momento del ascenso de los excéntricos pasajeros de razas y nacionalidades distintas, y de las mercaderías, cajones con ostras, bebidas, verduras y frutas de todo tipo, mientras decenas de vendedores ambulantes turcos se esfuerzan por vender telas y otras prendas a los viajeros.
Agatha en la pantalla Grande, la Chica y el Teatro
El actor británico Austin Trevor, fue el primer Hércules Poirot en el cine protagonizando tres títulos : “Alibi”(1931), “Black Coffee) del mismo año y Lord Edgware Dies (1934).En realidad, fue el que más veces lo interpretó en la pantalla grande, y además tuvieron que pasar muchos años para que el personaje volviera al cine, y fue en 1965 con Tony Randall en “The Alphabet Muders”. Muy diferente es la historia cinematográfica de Sherlock Holmes, que entre el cine mudo ( unos 40 entre cortos y seriales) y el sonoro, se aproximan a unos 70 títulos, 12 de ellos interpretados por el mejor Holmes de todos los tiempos : Basil Rathbone, con Nigel Bruce en el papel del Dr. Watson, filmes de la Universal Pictures.
Miss Marple, la viejecita tan querida por Agatha Christie, fue interpretada por grandes actrices. Margaret Rutherford, lo hizo en cuatro películas: “El tren de las 4,50” (1961), “Después del funeral”(1963), Asesinato a bordo” (1964) y en ese mismo año, “Murder most foul”. Helen Hayes, una primera dama del teatro, debutó en el cine en 1917 y coprotagonizó junto a Gary Cooper, la primera versión de “Adios a las Armas”(1932), también fue antológico su papel en “Anastasia” (1956) con Ingrid Bergman y Yul Brynner. La señora Helen Hayes interpretó a Miss Marple en “A caribbean Mystery”(1983) y“Murder with mirrors”(1985) junto a Bette Davis y John Mills.
De todas las versiones cinematográficas de obras de Agatha Christie, sin lugar a dudas, la mejor de todas es “Testigo de cargo”(1957), dirigida por el genial Billy Wilder, filme que obtuvo seis nominaciones al Oscar, incluyendo el de mejor película. Aquí no está Poirot ni miss Marple, la historia está basada en un cuento de 1925 que la misma Christie adaptó para el teatro, estrenándose en 1953 en Londres. Además del suspenso, la intriga y las sutilezas, la película cuenta con actuaciones memorables, principalmente la de Charles Laughton, en el papel del abogado criminalista Sir Wilfrid Roberts. Por este trabajo, Laughton fue nominado con un Oscar como mejor actor y Elsa Lanchester, en el rol de la enfermera personal de Sir Roberts, obtuvo una nominación como mejor actriz de reparto. Entre las primeras figuras también se encontraban Marlene Dietrich, Tyrone Power, y John Williams.
La mayoría de las obras de teatro de Agatha Christie, fueron adaptaciones de sus propias novelas o cuentos, pero “La Ratonera” (The Mousetrap), perteneciente al género de policiales, se convirtió en un éxito tan grande que figura en los Guinness. Estrenada en noviembre de 1952, en el West End londinense, llevaba hasta 2011 el record de 24.537 representaciones, con más de10 millones de espectadores. En el estreno, el papel del sargento Trotter fue interpretado por Richard Attemborough. “La Ratonera”, se convirtió en una curiosidad para los turistas que arribaban a Londres, incluso fue puesta en las recomendaciones junto a las visitas a la Tate Gallery y el Museo Británico.
El misterioso día en que Agatha Christie fue la víctima
Sucedió en 1926, y la protagonista fue Agatha Christie, por entonces de 36 años , bastante conocida como escritora, casada con un coronel que fue piloto en la Gran Guerra. Una mañana su automóvil apareció abandonado a pocos metros del camino, su licencia de conducir y otras pertenencias tiradas en el piso. La policía actúa de inmediato y realizó un rastrillaje por los campos y bosques aledaños e incluso un lago. La prensa se hace eco y comienza a titular las primeras páginas: ¿ Se suicidó?, ¿La mataron?. La misteriosa desaparición lleva a la policía a sospechar de su marido cuando descubren que éste tenía una amante, su secretaria. Pasan los días, hasta que una noche, en un hotel termal a unos 400 kms. de distancia del lugar donde se encontró el automóvil, un músico de la orquesta que animaba las veladas en el hotel, observa a una mujer sentada y sola que daba con la descripción que aparecía en las fotografías de los diarios. Alertada la policía, ve que la mujer se había identificado como oriunda de Sudáfrica, y que figuraba con el nombre de la amante del esposo. Ella no recuerda nada, dice que tiene amnesia, la prensa se pregunta si es un ardid publicitario ante el lanzamiento de un nuevo libro. Los psicólogos definen esta actitud como “fuga histérica”, al enterarse de la infidelidad del marido, con quien había tenido una hija, Rosalind. Esta desaparición de Agatha Christie, fue llevada al cine en 1979, con el título de “Agatha”. La dirección fue de Michael Apted y las actuaciones de Vanessa Redgrave como la escritora y Timothy Dalton en el papel de Archie Christie, su esposo infiel.
Cuando obtuvo el divorcio, Agatha, hizo un viaje a Medio Oriente y allí conoció a un joven arqueólogo, Max Malowan, se enamoraron y se casaron, y viajaron por el mundo, una de sus grandes debilidades, la otra, fue comprar casas, llegó a tener ocho en forma simultánea. En 1938 adquirió la mansión Greenway House, que a partir de2004 fue convertida en museo. En 1971 recibió la Orden del Imperio Británico, entregada por la reina Isabel II, fanática de sus novelas. Su segundo matrimonio fue un éxito, el arqueólogo estuvo a su lado hasta que la “Reina del crimen” murió en 1976 a los 85 años. De su herencia, los números no son tan claros, pero las cifras más sensatas hablaban de unos 800 millones de dólares. Según una publicación de la Unesco de 1978, Agatha Christie era el autor literario más traducido en el mundo entero, 282 veces, seguida por el creador del inspector Maigret, el belga Georges Simenon con 104 veces. De Simenon, que será tema para otro artículo, se vendieron más de 500 millones de libros, en 55 lenguas, y solamente en Francia se realizaron decenas de filmes con sus historias, y Jean Gabin, lo interpretó magistralmente en tres oportunidades.
Una curiosidad: si alguna vez se encuentran con una novela rosa, cuya autora es Mary Westmacott, no desconfíen, ese nombre no es real, es un seudónimo que utilizó Agatha Christie en las seis novelas de amor que escribió para dejar descansar a sus muertos.
Artículo de Jorge Luis Scherer-periodista,profesor de literatura y cine- para Ultracine.