Ante el gran interés despertado por la posibilidad del regreso del autocine como respuesta ante la crisis que atraviesa la exhibición cinematográfica, Ultracine dialogó con el referente del sector Adrián Ortiz, de Celuloide Digital.
Ultracine: ¿Considera que el autocine es una alternativa ante la crisis del sector de la exhibición?
Adrián Ortiz: Desde Celuloide Digital creemos en el autocine como una alternativa a corto plazo, pero no para todos los casos y eso es importante recalcarlo.
Será una alternativa, porque creemos que será una de las salidas que se van a permitir antes de que se liberen los cines de todas las restricciones. Pero se trata de un modelo nuevo, que aún no está funcionando en la Argentina o en la región. Montar un autocine no es imposible, pero tampoco es tan sencillo.
Desde la empresa somos muy responsables en responder consultas y tratar de ayudar con el modelo para que el empresario cinematográfico en su intento de salir de una crisis, no termine fracasando.
Para nosotros lo importante no es solo la venta, sino también acompañar con nuestro conocimiento, el plan de negocio y su implementación. No nos interesa vender si no es para el éxito de quien invierta en este sistema.
U: ¿Qué ofrece Celuloide Digital al empresario que desea invertir en un autocine?
AO: En primer lugar, nuestro conocimiento del mercado, principalmente en Argentina, y Paraguay, un conocimiento 360° del negocio. No solo el hardware necesario para implementarlo, sino todo el conocimiento que lleva el modelo de negocio del autocine que es totalmente diferente al de una sala de cine tradicional.
También la sinceridad. Nosotros no estamos buscando vender más equipos en este momento en el que el mundo se frenó. Lo que queremos es que quien invierta lo haga con toda nuestra “expertise” para que sea un negocio rentable. Tenemos todo para poder acompañar al empresario: sinceridad, que es el lema de la compañía; el conocimiento avalado por nuestra trayectoria y el hardware necesario para poder asistirlos, y así instalar el mejor autocine.
U: ¿Cuáles son los principales desafíos a la hora de montar un autocine?
AO: Lo que nosotros encontramos como el mayor desafío se encuentra en la pantalla, y su estructura. Las pantallas son de tela y corren el riesgo de dañarse por efectos del clima. Estamos barajando diversas alternativas, como pantallas inflables para autocines pequeños.
Otro de los desafíos es lograr un negocio 360°. Es importante pensar qué contenido se podrá ofrecer para que exhibición sea mucho más amplia, con un promedio de espectadores por vehículo más cercano a las 3 personas que a las 2. Esto va a lograr que sea más alto el ingreso por box office, y aumentará las posibilidades de ingresos por el Candy. También se podría desarrollar un área gastronómica, ya sea de catering o servicio de food trucks. A esto se puede sumar la publicidad local o gubernamental, si lo hubiera, lo que permitiría que el modelo de negocio del autocine, que es muy de nicho, pueda ser rentable y prospere en el tiempo.
U: ¿Hay interés por parte de los empresarios cinematográficos por este formato de exhibición?
AO: Tenemos una gran cantidad de consultas. No solo de empresas cinematográficas actuales, también de muchísima gente que tiene otro tipo de negocios como haciendas, canchas de futbol, boliches, empresas de catering, de entretenimiento. Actualmente estamos asesorando y cotizando para Argentina y otros países de la región.
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