La secuela del más sorpresivo éxito del grupo Marvel llega a las salas argentinas con el regreso de todos los clásicos personajes.
A partir de «Iron Man» en 2008, todas las películas basadas en cómics y personajes de Marvel estuvieron de algún modo conectadas con el propósito de crear un universo y una historia macro que los contuviera a todos. Iron Man, Thor, Hulk, el Capitán América, eran sin dudas los más reconocidos y por eso tuvieron sus películas individuales.
Pero llamó la atención cuando en 2014 se estrenó «Guardianes de la galaxia», un filme basado en un cómic sólo conocido por los muy versados en las historietas de la «Casa de las ideas» (como se conoce a Marvel) y más aun cuando se dijo que ese filme, aparentemente de bajo perfil en relación a títulos como «Los vengadores», sería de vital importancia para el desarrollo de ese «multiverso» que conectaba a todas las películas del estudio productor.
El filme, centrado en el la historia de un grupo de anti-héroes (a veces salvadores, otras veces ladrones y piratas) que deben unirse en contra de su voluntad para hacer frente a una amenaza intergaláctica. La película, dirigida por James Gunn, fue un enorme éxito de crítica y de público, recaudando más de US$ 770.000.000 de dólares a nivel mundial.
Tres años después llega la secuela, en la que los guardianes ya son un grupo más establecido aunque las chispas entre ellos suelen saltar más veces de la cuenta. Ellos son el humano Peter Quill (más conocido como Star Lord), Gamora, Drax el Destructor y el peculiar dúo que componen el mapache Rocket y la planta alienígena Groot.
Tras una misión fallida, los guardianes son perseguidos por una raza alienígena que intenta recuperar un botín asaltado por Rocket. Sin embargo, una misteriosa figura los ayuda a escapar en una tormenta de meteoritos (en una secuencia que «recuerda» bastante al escape del Halcón Milenario en «El imperio contraataca», de Star Wars…).
Tras un aterrizaje de emergencia en un planeta desconocido, la nave del misterioso salvador aterriza junto a ellos y se rebela a su piloto: nada menos que Ego, el padre de Peter Quill, quien desapareció cuando era tan sólo un niño.
El personaje de Ego está interpretado nada menos que por Kurt Russell. Pero mientras Peter intenta recomponer lazos con su padre y averiguar porqué los abandonó a él y a su madre, una poderosa amenaza se cierne sobre el grupo.
La primera película sorprendió por su frescura, humor y desparpajo dentro de un universo de historias más serias y clásicas. A quienes les encantó esa vuelta de tuerca en el mundo de los personajes de Marvel, seguro disfrutarán de esta secuela que, pese a todo, es inferior a su primera parte por dos motivos: primero, el elemento sorpresa ya pasó. Segundo, y más importante, la película pasa demasiado tiempo analizando a los personajes desde sus sentimientos. No está mal, pero tanto el humor como el ritmo de la narración se resienten un poco.
De todas maneras, el talento de Gunn como guionista y director para crear personajes carismáticos a más no poder (en especial el caso de Drax, interpretado por el luchador Dave Bautista, quien cobra más protagonismo en esta entrega y tiene a su cargo los mejores one-liners del filme) sigue intacta.
Este es el trailer de «Guardianes de la galaxia Vol.2«:
